Los Bravos
Los Bravos fue una influyente banda de rock española formada en 1966. Se hicieron mundialmente famosos por su éxito "Black is Black", que se convirtió en un hito en la historia de la música española al convertirse en la primera canción de un grupo español en llegar al Top 10 en las listas de éxitos del Reino Unido y Estados Unidos.
Origen: Formados en Madrid, aunque algunos de sus integrantes eran de Alemania e Italia.
Integrantes originales:
Mike Kogel (voz) – Alemán, conocido por su potente voz (al estilo de Gene Pitney).
Tony Martínez (guitarra)
Pablo Sanllehí (batería)
Manolo Fernández (teclado)
Miguel Vicens (bajo)
Estilo musical: Beat, garage rock, pop rock psicodélico — con claras influencias del rock británico de los años 60.
"Black is Black" (1966) – Su mayor éxito internacional.
"Bring a Little Lovin’" (1968) – Compuesta por los Bee Gees.
"I Don’t Care"
"Going Nowhere"
Abrieron la puerta a la internacionalización de la música pop española.
Se destacaron por cantar en inglés, lo que no era habitual entre bandas españolas de la época.
Son considerados pioneros del rock español con proyección internacional.
Los Bravos fue un grupo español de música rock nacido en los años 60. Se trata de una de las pocas bandas de rock en español que han tenido repercusión internacional, debido a que el primer LP está grabado en inglés y gracias sobre todo a sus dos grandes éxitos «Black Is Black» (1966) y «Bring a Little Lovin' (1968).
La buena pronunciación en lengua inglesa del carismático cantante, el alemán Michael Volker Kogel (desde su separación de Los Bravos en 1969 conocido como Mike Kennedy), fue una de las principales bazas con las que contó el grupo a la hora de «exportar» sus canciones, así como la presencia escénica y su poderosa voz, que al público estadounidense le recordaba a la de Gene Pitney, otra estrella rock del momento.
El grupo se creó en 1965, tras el encuentro en la discoteca Jaima en Cala Mayor (Palma de Mallorca) de miembros de Los Sonor, grupo de Madrid en el que militaban el guitarrista Antonio Martínez y el teclista Manuel Fernández Aparicio, y de Mike and The Runaways, que tras su estancia y experiencias musicales en Alemania desde noviembre de 1964 regresaban a Mallorca en julio de 1965. El grupo liderado por Kogel tenía en sus filas al bajista Miguel Vicens y al batería Pablo Sanllehí.
Esta nueva formación mantuvo el nombre de Los Sonor, hasta que Manolo Díaz, que había sido miembro de la anteriormente mencionadan impresionado por la voz y la personalidad de Mike, habló de ellos al mánager y productor suizo Alain Milhaud. Este, que era director artístico de Discos Columbia, aceptó representarlos y negoció un contrato discográfico con la propia Columbia. El grupo iba a contar con canciones escritas por el propio Díaz
Acerca del origen del nombre del grupo existen varias teorías. Una leyenda generalizada es que Tomás Martín Blanco, en su programa de radio "El Gran Musical", que se hacía ante el público, decidió buscarles uno por votación popular. Gustaron tanto que al terminar su actuación el público entusiasmado gritaba "¡Bravo!" y decidieron llamarse "Los Bravos".
La versión oficial fue que al final de la emisión del programa del 13 de marzo de 1966 desde el Teatro Zarzuela, una de las fanes ganó el concurso porque se le "ocurrió" el nombre de "Bravos".
La verdad, de acuerdo con José Ramón Pardo (página 91), es que la discográfica ya tenía decidido ese nombre desde mucho antes, por ser una palabra fácil de identificar tanto en España como en el extranjero. La primera canción del grupo tenía, curiosamente, un título muy apropiado: "No sé mi nombre" (grabada en inglés con el título de "I want a name").
Con solo oir mencionar a Los Bravos nos viene instantáneamente a la cabeza un ritmo obsesivo marcado por el bajo y la batería y al que poco a poco se van sumando el resto de instrumentos hasta que una voz nos dice aquello de “Black is black / I want my baby back / It’s grey, it’s grey / since she went away”. Para bien o para mal, Los Bravos siempre serán asociados a una canción, a esta canción. Para nosotros fueron el primer grupo nacional que rompía fronteras y conseguía llegar a los puestos más altos en las, hasta esos momentos, impenetrables listas británicas y estadounidenses; para los ingleses Los Bravos no serían más que el típico grupo One Hit Wonder, ya que su fama mundial solo se debe a esta canción; pero no adelantemos acontecimientos…
Para encontrar los orígenes de Los Bravos hay que situarse en un día de 1965 cuando en la discoteca madrileña Jaima se encuentran el grupo madrileño Los Sonor y el mallorquín Mike & The Runaways. El grupo nace de la fusión de ambas formaciones, así de los antiguos Los Sonor son el guitarrita Antonio Martínez y el teclista Manolo Fernández, y del grupo balear el cantante Michael Volker Kogel, más conocido como Mike Kennedy, el bajista Miguel Vicens y el batería Pablo Sanllehí. En sus primeros bolos juntos siguen conservando el nombre de Los Sonor hasta que en uno de ellos les ve un antiguo componente del grupo; era Manolo Díaz, que en esos momentos trabajaba en el departamento de promoción del sello Columbia. Manolo piensa que con una buena campaña pueden tener posibilidades de éxito y para ello habla con el afamado productor Alain Milhaud. Este les fue a ver en un concierto y automáticamente les quiso contratar; a pesar de algunas reticencias iniciales el grupo acepta. Como Alain Milhaud no quería repetir experiencias pasadas con otros grupos, les hizo firmar un contrato en el que ejercía un poder absoluto en las decisiones del grupo, desde la actividad discográfica, a la indumentaria, pasando por las entrevistas y el empleo del tiempo libre, nada tenía que dejarse al libre albedrío. Antes de poder firmar tenían el problema de que todavía tenían contrato en vigor con el sello Philips, pero estos, al enterarse de la contratación de Mike y del abandono del grupo de los temas instrumentales, rompieron el contrato y el grupo obtuvo la carta de libertad.
La compañía les lanzó como Los Nuevos Sonor, pero sabían que con ese nombre no iban a ningún lado y pronto decidieron cambiarlo. Para ello, a raíz del lanzamiento del que sería su primer single “It’s Not Unusual / No Sé Mi Nombre” (Columbia, 1966), y aprovechando el nombre de la que sería su cara B, organizaron un concurso para que los fans les bautizaran. Hasta aquí todo parece nada más que una campaña publicitaria de lo más normal pero no era así. Antes de todo esto Milhaud había ido con un acetato -un disco que sólo se podía poner unas 4 ó 5 veces antes de que fuese inservible- a la Cadena SER para ponérselo a Tomás García Blanco, director del programa El Gran Musical. A Tomás les gustó y entre ellos decidieron organizar toda la parafernalia correspondiente para hacerles publicidad. En realidad el nombre ya estaba decidido de antemano, Manolo Díaz fue su ideólogo y a todos les gustó; Los Bravos sonaba y se escribía de igual modo en diferentes idiomas. Para que todo fuese “legal”, Manolo mandó la postal para que fuese elegida. Pero esto no era el final sino el principio de toda la operación publicitaria que tenían pensado: para su presentación oficial se decidió hacer una edición especial de El Gran Musical en el Teatro de la Zarzuela en la calle Jovellanos, siendo la primera vez que este teatro se abría a un grupo pop. Y para rematarlo la cadena SER retransmitiría en directo el recital. Fue un gran éxito e hizo que la industria musical se diese cuenta del poder de comunicación de los medios radiofónicos.
Audición de canciones